miércoles, 27 de octubre de 2010

ZONA ATLANTICA

REGIÓN CARIBE

Topografía

La región Caribe en su parte continental está conformada administrativamente por los departamentos de Atlántico, Bolívar, Cesar, Córdoba, La Guajira, Magdalena y Sucre. La región se encuentra ubicada al norte del país ocupando un espacio geográfico de 132.244 Km2.

La mayoría de las tierras de la región son bajas y planas. Algunas ramificaciones de la cordillera de los Andes se presentan en Córdoba, Bolívar y Cesar, además de la Sierra Nevada, aunque un poco apartada de la cordillera, que es compartida por los departamentos de Cesar, Magdalena y La Guajira.
Al norte de Bolívar se encuentran el Canal del Dique y la serranía de San Jacinto, que es una prolongación de la Serranía de San Jerónimo desde Sucre y que conforma los Montes de María; en la parte media la subregión de la Mojana y al sur la serranía de Santo Domingo y serranía de San Lucas, siendo esta última una continuación de la Cordillera Central. En el Cesar, a pesar de estar rodeado por la Sierra Nevada de Santa Marta al noroccidente y la Serranía de Perijá al oriente, la mayoría del territorio está formado por tierras bajas, en especial hacia el suroccidente cerca al río Magdalena, lo que permite un clima cálido en gran parte de éste (78,8%).

La geografía física

Físicamente, el Caribe Continental colombiano está formado por una llanura que cuenta con un relieve que va de ondulado a plano, muy cerca al nivel del mar. Solo sobresalen la Sierra Nevada de Santa Marta, con alturas hasta los 5.775 m, y las serranía de Perijá y de los Motilones, en los departamentos de Cesar y Guajira, en un territorio que en general no supera los 500 m de altitud. En términos de la zonificación climática el Caribe Continental se clasifica en promedio como cálido y seco.

La erosión del suelo depende, entre otros elementos, de las características del terreno en términos de su pendiente, o el relieve en general. En la parte alta de las cuencas hidrográficas los ríos remueven materiales del suelo y los arrastran junto a los que han llegado a su cauce por simple deslizamiento. Por ello, pronunciadas pendientes, combinadas con exceso de lluvias que enriquecen el caudal de los ríos se traduce en un mayor poder erosivo (Hovius, 1998).

En una región relativamente homogénea en términos de las características litológicas (composición física y química del suelo y las rocas), la erodabilidad depende de la temperatura y la precipitación. En este punto hay que aclarar que no es el promedio anual de precipitación el factor clave en estos procesos. El régimen de lluvias y su estacionalidad es más importante en este sentido, debido a que en zonas donde hay una estación de lluvias muy intensa y prolongada el efecto de ésas sobre la erosión va a ser más pronunciado (Restrepo, 2005). Así mismo, durante la época de sequía las altas temperaturas y el viento ayudan al proceso de denudación del suelo.

El clima

Se puede decir que  la geografía física tiene una gran importancia para analizar los patrones de producción y de especialización de las diferentes regiones de un país. El clima tiene efectos sobre la productividad agrícola en la medida que éste afecta la duración del período de crecimiento de los cultivos, la temperatura, la precipitación y los patrones de erosión del suelo.

En el Caribe Continental las condiciones climáticas, no han sido favorables para el desarrollo agrícola. Las condiciones de temperatura, humedad, pluviosidad, han sido en gran parte del territorio adversas para permitir la consolidación de una agricultura comercial. En esta región se presentan los mayores índices de radiación y de brillo solar del país, con valores de hasta 10 horas de brillo solar al día en promedio (Unidad de Planeación Minero Energética, 2005).

Suelos


Los suelos del Caribe Continental varían notablemente a nivel regional. Existen zonas muy secas y algunas desérticas, como la península de La Guajira y zonas bastante húmedas, en la Sierra Nevada de Santa Marta y en el sur de Bolívar. Vastas zonas tienen problemas de fertilidad de los suelos, pero en gran parte de éstas el aprovechamiento de los recursos naturales se efectúa a través de explotación minera.


Atlántico

Caracterizado por tener suelos planos y ondulados, que no presentan problemas de erosión, con una zona cenagosa e inundable hacia el sur donde se encuentra el Embalse Guájaro. En todo el territorio el clima predominante es cálido. La fertilidad varía de moderada a baja, y el déficit de humedad durante gran parte del año no permite que se desarrolle una amplia actividad agropecuaria o que el sector aporte significativamente a la economía del departamento. De hecho en el Atlántico se realizan el 60% de las importaciones de productos agropecuarios de la región Caribe (Bonet, 1999).

Bolívar

 Con un 86,2% de su territorio con clima cálido, cuenta una topografía peculiar. Está constituido principalmente por tierras bajas, sin embargo, posee una vasta extensión de tierras de moderada elevación con pendientes pronunciadas. En Bolívar los suelos se pueden caracterizar por ciertos atributos específicos. Como primer lugar, las serranías se caracterizan por tener suelos erosionables, con bajos niveles de fertilidad. Estos suelos han sido objeto de varios estudios para la explotación minera y como resultado de ello son en efecto explotados comercialmente para tal fin (INGEOMINAS, 2005). En segundo lugar, las tierras bajas de las riberas del río Magdalena, el Canal del Dique y la Mojana, a pesar de ser suelos periódicamente inundables, cuentan con muy buenos niveles de fertilidad (aptos para actividades agrícolas), que solo se ve afectada en épocas de sequía.

Cesar

Se pueden observar tres tipos de suelos:
1. Suelos bien drenados y de fertilidad baja y moderada, en la parte correspondiente a la Serranía de Perijá.
2. Suelos afectados por inundaciones y encharcamientos, que en condiciones de mal drenaje limitan las posibilidades agropecuarias en las riberas de ríos y ciénagas.
3. Los suelos en tierras bajas y planas no-inundables, que son las más productivas.
Aún cuando la erosión no es un problema en este departamento, gran parte de sus suelos (55%) se encuentran en niveles donde ésta no es apreciable. Sólo el 11,4% de las tierras poseen altos niveles de fertilidad, característica que obstaculiza el desarrollo de actividades agropecuarias.

Córdoba

El departamento de Córdoba se caracteriza por presentar un clima cálido y tierras bajas en gran parte de su territorio. La fertilidad va de moderada a muy baja en casi todo el departamento y las constantes inundaciones en algunas zonas y falta de humedad en otras, dificultan las actividades agrícolas de alta productividad. Sobresalen los suelos del Valle del Sinú con aproximadamente 12.000 Km2, que tienen altos niveles de fertilidad, profundidad y disponibilidad de nutrientes para la producción de cultivos comerciales.

La Guajira

Sus suelos son planos y extremadamente áridos. Hacia la parte central los suelos tienden ser arenosos y limosos. En parte esta constitución se debe a que en la zona noroeste los vientos transportan arena fina y limos. El clima predominante es cálido con temperaturas promedio de 27º C y precipitación inferior a los 400mm anuales, lo cual da como resultado suelos con características desérticas y escasa vegetación. Esto incide sobre la explotación productiva de los suelos en La Guajira, en donde el 50% de ellos se encuentra en los niveles de fertilidad entre muy bajo y bajo, y un 48% en moderado, lo que dificulta la realización de actividades agropecuarias.

Magdalena

El clima predominante en su territorio es el cálido. Cabe destacar que es el único departamento de la región que cuenta con un área climática entre los 0 y 1,5°C, que se clasifica según zonificación climática como nival. En cuanto a la productividad de sus suelos, a pesar de los bajos niveles de erosión en más del 90% de su territorio, solo 45,1% y 3,9% se encuentran en los niveles de moderada y alta fertilidad, respectivamente. En este caso la fertilidad del suelo está asociada entonces a la disponibilidad de nutrientes y de agua.

Sucre

El departamento cuenta con casi tres cuartas partes de su territorio en los niveles entre moderada y alta fertilidad que benefician las actividades productivas, sin dejar de lado los controles necesarios en las zonas inundables.
Sucre es también en su mayoría un departamento relativamente plano. Casi el 60% de su área está conformado por terrenos con una pendiente de sólo hasta 1,35° de inclinación.



Adriana Solarte
Luis Cere Ortega
Oscar Villarreal
    Johana Cabrera 
                          

 Publicado por :  

7 comentarios:

  1. He estado viviendo hace años atrás en distintos departamentos en cordoba y tal como se describe, es muy difícil dedicarse al campo producto de las constantes inundaciones

    ResponderEliminar
  2. para mi esta muy bien expresado lo que di se es verdad megos to como lo expresaron y lo argumentaron me gusto mucho

    ResponderEliminar
  3. me sirvio bastan te es lo mas espresado que e bisto in creible me gusto

    ResponderEliminar
  4. me sirvio bastan te es lo mas espresado que e bisto in creible me gusto

    ResponderEliminar
  5. ¿Aqui no esta la vegetacion ?, solo me falta esa

    ResponderEliminar
  6. Me gustaría saber cuantas hectáreas agrícolas tiene Sitionuevo Magdalena

    ResponderEliminar